Adopción de Balto

Loló, Sally, Cora, Balto y Aitana han venido en un mismo "paquete". Los trajo un hombre, una mañana al albergue. Al parecer una señora se estaba haciendo cargo de ellos, pero regresaba a su país de origen y solamente se llevó a dos con ella. El resto vinieron a parar al albergue irremediablemente.
Balto se muestra algo desconfiado. El palo de tener que venir al albergue ha sido tremendo. Al principio era imposible tocarlo pero poco a poco ha ganado confianza y ya se deja acariciar. Sabemos que en una casa, con las atenciones adecuadas, sería una gato totalmente normal. Intentaremos que su estancia en el centro sea lo menos traumática posible, aunque tampoco son las condiciones ideales para él...